Descubre el secreto para cultivar rosas perfectas en tu jardín y sorprende a todos
Si siempre has creído que cultivar rosas es demasiado complicado, ¡estás en el lugar adecuado! Con algunos conocimientos básicos, cuidar de estas plantas puede ser tan sencillo como atender otras especies perennes en tu jardín. De hecho, puede que ya estés cultivando algunos miembros de la familia de las rosas, ya que frutas como las moras, manzanas y albaricoques también pertenecen a la familia Rosaceae.
Las rosas son incomparables por su belleza, grandes flores, fragancia y su capacidad de florecer repetidamente. Su historia se remonta a más de 5,000 años en China, aunque los registros fósiles sugieren que las rosas han existido por millones de años. A lo largo de los siglos, se han utilizado no solo en la jardinería, sino también en medicamentos, perfumes e incluso como moneda.
¿Te encantan las rosas pero te sientes intimidado para plantarlas? Sigue leyendo para obtener consejos sobre variedades, plantación y cuidados que te ayudarán a hacer crecer la reina de las flores en tu jardín.
Cómo elegir la rosa adecuada
Hay más de 30,000 variedades de rosas disponibles. ¿Cuál se adaptará mejor a tu espacio y condiciones de cultivo?
Antes de plantar, asegúrate de que la rosa que elijas se ajuste a tu clima y condiciones del suelo. Consulta tu zona de resistencia USDA para confirmar que la rosa pueda soportar las temperaturas más frías de tu área. Algunas variedades son más resistentes a la sequía, mientras que otras toleran mejor el calor y la humedad.
A continuación, exploraremos algunas de las variedades más populares de rosas.
Rosas híbridas de té
Si has recibido un ramo de rosas de una floristería, es probable que contenga rosas híbridas de té. Estas rosas son las que la mayoría imagina al pensar en rosas. Las características de las rosas híbridas de té incluyen:
- Grandes flores en forma de espiral en largos tallos, ideales para cortar.
- Altura de 3 a 8 pies.
- Variedad en fragancia, desde ligera hasta fuerte y afrutada.
- Florecen en ciclos a lo largo de la temporada.
- Son más propensas a enfermedades y daños invernales que otras variedades.
Un buen ejemplo es la variedad ‘Black Pearl’, que presenta un hermoso color rojo oscuro y una fragancia deliciosa.
Floribundas
Compactas y arbustivas, las floribundas son cruces entre híbridos de té y las resistentes rosas polyantha. Estas rosas:
- Alcanzan aproximadamente 3 pies de altura.
- Son prolíficas en floración.
- Florecen en racimos.
- Son más resistentes a enfermedades y al frío que las híbridas de té.
Prueba la variedad ‘Julia Child’, que exhibe un hermoso color amarillo mantequilla.
Grandifloras
Las rosas grandifloras combinan la fuerza floral de las floribundas con la forma clásica de las híbridas de té. Sus características incluyen:
- Florecen repetidamente todo el verano.
- Generalmente tienen una altura de 4 a 7 pies.
- Poseen grandes flores y tallos más cortos.
- Varían en fragancia y color, incluyendo tonos vibrantes.
Una opción destacada es ‘Queen Elizabeth’, una grandiflora de pétalos suaves y rosa ondulados.
Rosas arbustivas
Las rosas arbustivas son un término general que se refiere a variedades que funcionan como arbustos de bajo mantenimiento. Estas son frecuentemente utilizadas en diseño paisajístico y pueden variar desde polyanthas de bajo crecimiento hasta grandes setos de Knock Out. Algunas rosas arbustivas recomendadas son:
- ‘The Fairy’, una rosa polyantha rosa que se mantiene bajo 4 pies.
- ‘Easy on the Eyes’, una rosa de pétalos simples multicolores resistente hasta la zona 4.
- ‘Carefree Beauty’, una rosa doble vigorosa y resistente a enfermedades, ideal para setos.
Rosas miniatura
Las rosas miniatura son versátiles y perfectas para cultivar en macetas o en espacios reducidos. Estas:
- Generalmente miden menos de 2 pies de altura.
- Vienen en casi todos los colores y formas de flor.
- Son igual de resistentes que las rosas más grandes.
Una opción encantadora es ‘Life’s Little Pleasures’, con flores lavanda perfectamente formadas.
Rosas trepadoras
Las rosas trepadoras abarcan una amplia variedad y son ideales para aprovechar el espacio al crecer verticalmente. Estas envían cañas largas que se pueden entrenar para crecer sobre un enrejado o pérgola. A diferencia de otras plantas trepadoras, las rosas no producen zarcillos, por lo que necesitarás ayudarlas a fijar sus cañas a un soporte vertical. Algunas rosas trepadoras que podrías considerar son:
- ‘Cécile Brunner’, una trepadora de 10 pies con muchas flores pequeñas y esponjosas de color rosa.
- ‘Polka’, con grandes flores de color melocotón y un aroma intenso.
- ‘Lady Banks’, una gigantesca trepadora que florece en primavera (15-20 pies de altura) con flores pompones amarillas o blancas y cañas sin espinas.
Aunque estas variedades son las más populares, no olvides explorar las antiguas rosas de jardín, las rosas silvestres, noisettes, ramblers y rugosas. ¡El mundo de las rosas es vasto y podrías encontrar una variedad inusual perfecta para tu jardín!
¿Rosas injertadas o de raíz propia?
Las rosas injertadas son las más comúnmente disponibles. Estas se producen injertando una rosa deseable a un portainjerto más vigoroso. Aunque suelen prosperar, a veces pueden enviar cañas (denominadas chupones) desde el portainjerto, que se verán diferentes de la rosa que compraste. Además, las variedades injertadas son más susceptibles a la muerte invernal.
Si vives en un clima frío, vale la pena buscar rosas de raíz propia. Estas son genéticamente iguales desde las raíces hasta las flores. Aunque pueden tardar más en establecerse, es más probable que sobrevivan a un invierno severo y garantizarán que la rosa produzca únicamente las flores que compraste.
Ambos tipos de rosas se pueden adquirir en un vivero local.
Cómo plantar rosas
El momento ideal para plantar una rosa es en primavera o otoño, cuando las temperaturas oscilan entre 40 y 60 ℉. Si decides plantar rosas en el calor del verano, asegúrate de regarlas con más frecuencia y proporcionar algo de sombra temporal para evitar que entren en shock al cambiar de lugar.
Pasos para plantar:
- Selecciona un lugar que reciba 6 a 8 horas de luz solar directa al día.
- Deja entre 2 y 3 pies de espacio entre cada rosa y cava un hoyo lo suficientemente grande como para acomodar el cepellón de la planta (al menos tan profundo como el contenedor de donde proviene).
- Coloca la rosa en el hoyo y rellena con una mezcla de compost y tu tierra nativa, cubriendo las raíces hasta el punto de injerto (la unión entre las raíces y los tallos).
- Riega abundantemente.
- Agrega una capa de 2 pulgadas de mulch para estabilizar la temperatura del suelo, reducir las malas hierbas y retener la humedad.
Cuidados de las rosas
¡Ahora que tu rosa está plantada! Aquí tienes algunos consejos para el riego, fertilización y poda que te ayudarán a mantenerla en óptimas condiciones.
Riego
Las rosas prefieren un riego profundo e infrecuente en lugar de cantidades superficiales diarias. Para las rosas establecidas, riega de manera profunda, una o dos veces por semana, aproximadamente 2-3 galones por sesión.
Verifica diariamente las rosas recién plantadas y aquellas que crecen en clima caluroso (por encima de 85 ℉). Es posible que necesiten riego de 3 a 4 veces por semana o incluso diariamente hasta que maduren. Para todas las rosas, evita el riego excesivo utilizando la prueba del nudillo. Inserta el nudillo en el suelo; si está seco a esa profundidad, es momento de regar nuevamente.
Siempre riega en la base de la planta para dirigir la hidratación a las raíces donde más se necesita. El riego por encima puede provocar un follaje húmedo, favoreciendo enfermedades como el mildiú polvoriento y las manchas negras.

Fertilización
Para las rosas recién plantadas, el compost es suficiente. Puedes añadir un poco de harina de hueso o hongos micorrízicos al momento de plantar o mezclarlos en el suelo después. Evita los fertilizantes sintéticos para las rosas jóvenes, ya que contienen altos niveles de nitrógeno que pueden dañar las raíces.
Después de la primera temporada, promueve un nuevo crecimiento y abundantes flores fertilizando tres veces al año: cuando las rosas brotan en primavera, después de la primera floración y a mediados del verano. Algunos cultivadores prefieren aplicar un fertilizante orgánico cada 2-4 semanas.
Detén la fertilización 6-8 semanas antes de la última helada para estimular a las rosas a entrar en dormancia para el invierno.
Poda
La poda suele ser la tarea más temida por los nuevos cultivadores de rosas, pero manténlo simple. No es necesario podar tu rosa en los primeros 3 años (especialmente si es una trepadora). La tarea principal es eliminar cualquier parte muerta, enferma o dañada para revitalizar la rosa y fomentar el nuevo crecimiento.
Guías de poda:
- Poda a principios de primavera (después de la última helada) cuando las rosas comienzan a despertar y los nuevos brotes están hinchados.
- Utiliza tijeras de podar limpias y afiladas, desinfectándolas entre plantas para evitar la propagación de enfermedades.
- Corta las cañas muertas o enfermas hasta donde veas crecimiento saludable y verde.
- Retira las cañas que crecen hacia el interior de la planta, despejando las cañas que se cruzan en el centro, lo que interfiere con la circulación de aire.
- Procura podar justo por encima de un brote exterior (nodo de crecimiento). Esto fomenta que las cañas crezcan hacia afuera y mantiene el centro libre de congestión.
- Revisa las rosas nuevamente en otoño y corta cualquier parte enferma para que las enfermedades no sobrevivan al invierno.
- ¡Limpia bien! Los plagas y enfermedades pueden permanecer en el suelo o en los restos caídos, así que elimina y desecha tus recortes.
Plagas comunes en las rosas
Aunque las rosas son bastante resistentes, son el blanco favorito de algunas plagas. Aquí hay algunas de las más comunes que podrías encontrar.
Aphids
Los pulgones son pequeños insectos de cuerpo blando que aparecen para chupar los jugos de los nuevos brotes en primavera. Normalmente, se presentan en grandes colonias.
Por fortuna, son lentos y fáciles de controlar. Puedes intercalar tus rosas con plantas compañeras como milenrama, caléndulas y alliums ornamentales. Estas atraerán a sus depredadores naturales, como las avispas parásitas y las crisopas, y confundirán a los pulgones al enmascarar el olor de tus rosas.
Si los insectos benéficos no controlan tu infestación en una o dos semanas, rocía a los pulgones con un fuerte chorro de agua desde la manguera. No pueden volver a subir con facilidad. Si no te importa el factor desagradable, puedes aplastarlos con los dedos.
Los ácaros son pequeños insectos que suelen encontrarse en la parte inferior de las hojas. Aunque son difíciles de detectar, es fácil identificar sus telarañas pegajosas.
Provocan manchas marrones en las hojas. Puedes eliminar los ácaros con un fuerte chorro de agua desde la manguera y utilizar plantas compañeras, como harías con los pulgones.
Thrips
Los trips son insectos voladores muy pequeños que suelen encontrarse dentro de las flores de las rosas. Si encuentras botones marrones o deformes que nunca se abren, es probable que sean causados por trips.
Corta cualquier infestación visible de trips y deja que los depredadores hagan el resto. Las poblaciones de trips suelen disminuir por sí solas en unas pocas semanas. Si no es así, puedes rociar tus rosas con aceite de neem orgánico por la noche, pero solo como último recurso, ya que también perjudica a los insectos benéficos.
Larvas de Tijeretas
Las larvas de tijeretas (un tipo de avispa) son el principal problema aquí. Se asemejan a pequeñas orugas verdes y les gusta alimentarse de las hojas, dejando agujeros irregulares y manchas marrones. A veces, llegan a deshojar completamente las hojas.
Para las tijeretas, la eliminación manual es tu mejor opción. Puedes recogerlas con guantes o pinzas, o rociarlas con la manguera (recuerda mirar la parte inferior de las hojas). Los pájaros y las mariquitas se las comerán si evitas los pesticidas.
Enfermedades comunes en las rosas
Las enfermedades fúngicas son el problema más común que verás en tus rosas. Aunque algunas variedades pueden lidiar con la enfermedad de roseta de la rosa, las enfermedades que se enumeran a continuación son las más frecuentes. La mejor prevención es mantener tus rosas saludables a través de un buen riego, poda y espaciamiento.
Manchas negras
La mancha negra es una enfermedad fúngica común que causa manchas negras de forma irregular en las hojas, a menudo rodeadas de un círculo amarillo más grande. Cuando las cañas están afectadas, pueden desarrollar manchas púrpuras o marrones. Se propaga a través de esporas y prospera en la humedad, por lo que es esencial evitar el riego por encima y podar para una buena circulación de aire.
La mancha negra puede debilitar, pero no matará tu rosa. No debes alarmarte si la ves. Retira las hojas afectadas y limpia bien para evitar que las esporas reinfecten tus plantas. Recuerda que tu rosa no tiene que verse perfecta para estar saludable.
Mildiú polvoriento
El mildiú polvoriento es otro hongo que cubre tu planta con un recubrimiento blanco en forma de polvo. Prefiere días calurosos, noches frescas y humedad excesiva.
La prevención es clave: mantén tus rosas recibiendo de 6 a 8 horas de sol y riega en la base de la planta por la mañana, para que las rosas puedan secarse durante el día.
Si observas mildiú polvoriento, elimina todas las partes severamente infectadas de la planta y prueba esta solución casera: añade una cucharada de bicarbonato de sodio a un galón de agua y mezcla bien. Rocía las rosas, asegurándote de cubrir cada parte de la planta, y repite una vez a la semana según sea necesario.
Consejos finales sobre el cultivo de rosas
Las rosas son simplemente plantas de jardín como cualquier otra, ¡así que no te estreses por su cuidado! Recuerda que 6-8 horas de sol, un riego profundo e infrecuente, poda básica y la plantación de acompañantes para el manejo de plagas mantendrán tus rosas saludables.
Tanto si eliges una encantadora rosa miniatura para macetas en el patio, un seto impresionante o una trepadora dramática que asombre a los vecinos, no te arrepentirás de añadir rosas a tu jardín. Ten en cuenta estos consejos de cuidado y disfruta de la belleza de tus rosas.
Para obtener más información visual sobre el cultivo de rosas, puedes consultar el siguiente video:
Recomendado para ti
Basado en tu interés, esto puede gustarte.
